"Los datos son
estremecedores", indicó Figar en rueda de prensa posterior al Consejo de
Gobierno. "No todos tenemos por qué sabernos las provincias por las que
pasa el Ebro, pero sí el que lo tiene que enseñar", subrayó.
No tengo la tentación de
exculpar a los maestros que han cometido errores impropios de su condición,
pero sí quisiera hacer algunas matizaciones a las afirmaciones de la consejera
de educación de la comunidad de “Madriz”.
1.
Si no
todos debemos sabernos las provincias por donde pasa el Ebro. – ¿por qué se lo tiene
que saber un alumno de 6º de primaria?
2.
Si se lo tiene que saber un alumno de
primaria, -¿por qué no se lo debe saber
un alumno de instituto o universidad?
3.
SI se lo tiene que saber un alumno de
universidad, -¿por qué no se lo va a saber un diplomado, un licenciado, una
consejera de educación o un ministro?
4.
Otro gran error es entender que para enseñar hay
que saber sino más bien saber enseñar.
5.
Si para enseñar hay que saber todo lo que se me
pregunte, el mejor maestro/a sería en estos momentos Google, Wikipedia o los
152 tomos del Larousse, por tanto la Sra.
consejera podría prescindir de todo el profesorado y poner estos tres recursos
delante de cada alumno, mandar al
maestro a su casa conjuntamente con directores, inspectores, asesores de
educación, consejera y ministro.
6.
¿Quién regula el plan de estudios de los estudiantes
de magisterio?
7.
¿Por qué la inspección de enseñanza en vez de
observar estas posibles deficiencias pide en sus inspecciones a los educadores:
programa del día, programa semanal o quincenal, programa de área, proyecto
curricular de nivel, proyecto curricular de ciclo, evaluación de competencias,
evaluación de contenidos, evaluación de actitudes, plan de atención a la
diversidad, DIAC de alumnos ACNEES, plan de refuerzo y apoyo, actas de
reuniones de nivel, ciclo...?
8.
¿Piensan ustedes que con tanto papel le queda tiempo al profesorado de repasar por
dónde pasa el Ebro?
9.
Ahora pasaremos a valorar un 80% el “saber” y un
20 % el “saber hacer”.
10.
Mañana cuando el que “sabe” tenga que explicar a
un alumno –Qué le explicará lo que “sabe” o lo que debe “saber hacer”.
11.
Pasado mañana cuando
el alumno no se haya enterado de nada, volveremos otra vez a cambiar la
valoración y así mantener ocupado al personal en el desprestigio, la ignorancia,
la crítica sin soluciones y el fracaso de todo un sistema, que si lo comparamos
con otros sistemas: el político, el financiero, el económico, el del empleo, el
de la atención a la dependencia..., los pocos que se salvan son los médicos que
sanan a los enfermos y los maestros que enseñan que el Ebro existe.
Si los datos, Sra. Figar, son estremecedores, -¿qué es lo
que ha hecho para mejorarlos duran te la cantidad de años que lleva en la
consejería, -poner exámenes a los alumnos de infantil, 2º, 4º, 6º de primaria y
profesores, año tras año, exámenes tramposos
y a conveniencia para luego hacer estudios y estadísticas tramposas con las que
estremecerse?.
Como maestra de economía y empresa, que lo es por
titulación, nadie la examinó para los cargos que dedocráticamente ha ocupado y
por tanto no los hemos podido evaluaar ni estremecernos. Le recuerdo que la
echaron en su anterior mandato; consejera de empleo, posiblemente los
conocimientos que usted aprendió, como muy bien ha dejado claro “no es saber
por donde pasa el Ebro” ni tampoco el mínimo entendimiento de la gran cantidad
de personas que están en paro, y como consejera de educación solo ha aprendido
a estremecerse, sin llegar a entender, comprender o siquiera preocuparse por
dónde pasa la educación.
De David Torres.